Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio. Génesis 39:2
Introducción
A José, el hijo de Jacob, sus hermanos lo envidiaban y por eso intentaron deshacerse de él tirandolo en una cisterna vacía para luego acabar vendiéndolo como esclavo. La situación no era nada favorable para aquel joven soñador, pero Dios estaba con él y tenía planes especiales con su vida. Puede que hoy te sientas agobiado por tantos problemas, pero ¿sabes? Dios tiene el control. ¡El tiene planes contigo, así como los tuvo con José!
A pesar de todo, José se mantuvo fiel a Dios porque confiaba en su buena voluntad. Su ejemplo nos recuerda que si queremos ver la gloria de Dios es necesario que confiemos en él y en su Palabra para que así podamos seguir sus indicaciones. ¿Qué mas aprendemos de José?
1. Sabía que Dios estaba con él
Así como José, tú y yo debemos tener presente que a Dios no se le escapa nada. Él cuida de nosotros y por eso debemos esmerarnos siempre por glorificarlo en lo que sea que estemos haciendo. No importa lo terrible que parezca el panorama, si estamos conectados con Aquel que todo lo puede, no temeremos ningún mal. Para esto debemos buscarlo cada día, orando y meditando en su Palabra y en lo posible no dejando de congregarnos. (Génesis 39:21).
Donde José llegaba se convertía en un directivo. El encargado de la cárcel no tenía de qué preocuparse, porque José se ocupaba de todo. El Señor estaba con él y lo prosperaba en todo lo que hacía. Sea en la cárcel o en el palacio Dios estaba con él. Si crees que Dios está contigo vencerás toda adversidad y circunstancia.
2. Le iba bien aún en las peores situaciones
José estuvo a punto de morir por parte de sus hermanos, pero Dios no lo permitió. Lo vendieron y lo compró Potifar, un hombre de alto rango en el gobierno de Egipto.
Paso de sirviente a ser el administrador de la casa de este hombre. Fue tentado sexualmente y no cayó frente al acoso de la esposa de Potifar y prefirió perder su cargo, e ir a la cárcel que desobedecer a Dios. Estando preso, fue la mano derecha del jefe de carceleros y de ahí pasó al palacio.
Conclusión
El proceso te pone a prueba y produce paciencia, todo lo que Dios permite en tu vida es por tu bien, siempre hay una bendición detrás de todo esto. A José lo llevó a la grandeza de ser el hombre más importante de Egipto después de Faraón. A nosotros nos lleva a parecernos cada día más a Cristo. (Stg 1:3; Ro 8:28; Ge 41:40; 1 Co 11:1).
No hay comentarios:
Publicar un comentario