INTRODUCCIÓN
Aunque se puede decir que José era un buen muchacho, sus hermanos lo envidiaron e intentaron deshacerse de él, lo tiraron en una cisterna vacía y aunque pensaron en matarlo, acabaron vendiéndolo como esclavo. La vida no era nada favorable para aquel muchacho, pero Dios estaba con él y tenía planes especiales con él como los tiene contigo. Si hemos sobrevivido a toda clase de problemas es porque Dios tiene planes con nosotros.
José se mantuvo fiel en medio de todo. Su ejemplo nos demuestra que para soportar las pruebas necesitamos Fe y buena actitud. Vendrán momentos en los que creerás que no podrás resistir. VAS A SOBREVIVIR a todo eso porque los planes de Dios se cumplirán en ti. Veamos las características que hacían de José un sobreviviente en Dios:
1. SABÍA QUE DIOS ESTABA CON ÉL
Para fortalecerte con esta verdad, tendrás que estar conectado con él. No tengas miedo de los problemas, sean del tipo que sean, puede que te sientas en un callejón sin salida, pero Dios sigue ahí.
El tener claro esto, hará la diferencia entre la enfermedad y la sanidad, el problema y su respuesta. Para mantener la paz resultante de tener clara esta verdad. Tendrás que buscarlo cada día, meditar en su palabra y no dejar de ir a la iglesia mientras damos siempre lo mejor de nosotros en lo que sea que tengamos que hacer. (Génesis 39:21)
2. LE IBA BIEN AÚN EN LAS PEORES SITUACIONES
Aunque José estuvo a punto de morir a mano de sus hermanos, Dios no lo permitió. Lo vendieron y lo compró un hombre de alto rango en Egipto.
Pasó de esclavo a administrador de la casa de este hombre. Fue tentado pero no cedió ante el acoso de la esposa de este hombre y prefirió ir a la cárcel y perderlo todo que hacer lo indebido. Estando ahí se convirtió en la mano derecha del jefe de los carcelero y de ahí pasó al palacio.
CONCLUSIÓN
El proceso te lleva a la grandeza. Una buena actitud es clave. José no tenía suerte, tenía la gracia de Dios y una actitud correcta.
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